Dentro del ámbito de la agricultura urbana o ecológica, cada vez se está haciendo más popular una modalidad de cultivo que es el huerto vertical. El huerto urbano vertical, como su propio nombre indica, es un tipo de cultivo que no se hace a ras del suelo, sino en el que se utilizan muros o paredes.
De este modo, se optimizan espacios reducidos a los que sacarles partido con plantas comestibles, aromáticas o de uso cotidiano en la cocina.
Para crear estos huertos verticales, se suelen utilizar estructuras de muchos tipos: se puede construir un huerto vertical con palés, por ejemplo, para dar un toque rústico a la cocina y tener siempre a la mano las plantas y frutas que se utilizan en el día a día.
Las limitaciones son prácticamente las de la propia imaginación y un huerto vertical casero es una opción más que interesante para las personas que se quieren iniciar en el mundo del cultivo ecológico urbano.
Esto asegura una alimentación sana, libre de tóxicos y en la que los gestores del huerto controlan al 100 % la producción.
Qué se puede cultivar en un huerto urbano vertical
Son muchas las variedades y tipos de plantas que se prestan a crecer de un modo saludable y seguro en el huerto vertical. Generalmente, estos huertos siempre están enfocados al uso de plantas pequeñas y de uso habitual en el consumo alimentario.
Lechugas, rabanitos, fresas, tomate cherry, zanahorias, espinacas, guindillas o aromáticas como albahaca, hierbabuena, perejil u orégano son los tipos de plantas más presentes en los huertos urbanos verticales.
Hay huertos verticales que son un conjunto de todo esto y otros que se especializan en algún tipo de plantaciones. Ejemplo de estos últimos son los huertos verticales de aromáticas y especias o los huertos verticales de alimentos para ensaladas. Esto depende del gusto del agricultor y del uso que le dé a las distintas variedades en la cocina.
Ideas para montar tu propio huerto vertical
Hay cientos de ideas distintas para montar el huerto vertical ideal para cada cocina o espacio de almacenamiento y cultivo.
Materiales
Es muy habitual, en estos casos, el uso de material reciclado: viejos palés, botellas de plástico, trozos de marquetería, peceras… prácticamente cualquier objeto puede convertirse en macetero o soporte para colocar las plantas. Esto también aporta un interesante toque estético a los huertos verticales.
Colocación
Generalmente el huerto urbano se sitúa en las cocinas o en terrazas, en la pared más amplia, luminosa y libre de la estancia.
El primer paso es montar y fijar la estructura y, a partir de ahí, colocar los distintos maceteros con las variedades elegidas. Una influencia de luz de sol no directa, riego habitual y una revisión constante harán que las plantas crezcan con todo el vigor posible.
Consejos importantes
Es importante entender que un huerto urbano no tendrá la fuerza de crecimiento de un huerto tradicional en la tierra. Por ello, hay que probar con las distintas variedades de plantas, colocación y tipos de riego hasta dar con aquellos que crecen bien en el ambiente del huerto urbano y a los que se les saca partido fácilmente.
Estos son los consejos y principales apuntes a tener en cuenta sobre el huerto urbano. Trabajar en uno de ellos para consumo propio es emocionante y ofrece muy buenos ratos, así que solo te recomendamos ponerte a ello cuanto antes.