La hidroponía es un sistema en auge que ofrece interesantes ventajas y es accesible para todo el mundo, en cultivos pequeños o a mayor escala. A continuación te explicamos qué es un cultivo hidrológico y qué tipo de huerto podemos crear utilizando este método.
Qué es un cultivo hidropónico y todas sus ventajas
El término ‘hidropónico’ proviene de las palabras griegas ‘hydor’ (agua) y ‘ponos’ (trabajo), y aplicado al cultivo hace referencia a una técnica en la que la tierra se sustituye por un medio inerte que puede ser lana de roca, fibra de coco, zeolita, grava, corteza, arcilla expandida o simplemente agua.
Estos huertos de hidroponía pueden ser muy variados según el sistema utilizado, aunque en todos, el suministro de nutrientes y agua se realiza mediante una solución especial nutritiva. Esto es posible porque la tierra no es necesaria, y de hecho prescindiendo de ella se pueden evitar algunas de las problemáticas asociadas a los huertos tradicionales, como por ejemplo la utilización de pesticidas.
En qué consiste el cultivo hidropónico
Un huerto hidropónico se organiza de forma que las raíces queden en suspensión, utilizando algunos de los soportes o materiales antes mencionados. A la vez se le suministra agua que debe ir acompañada de todos los nutrientes y sales minerales que necesita un cultivo para desarrollarse y prosperar. Este sistema de cultivo es ideal tanto para profesionales como para ciudadanos que no tengan demasiado espacio y deseen crear su propio huerto urbano en casa. Solamente hacen falta cuatro elementos: el soporte donde crecerá la planta, otro soporte donde sujetar la planta, un depósito de agua y una bomba para que esta circule y se vaya reciclando. Existen dos sistemas básicos para el cultivo hidropónico:
- Cultivo en agua. La planta se mantiene sujeta a una plataforma y la raíz flota sobre la solución nutritiva.
- Cultivo en sustrato inerte. Para el soporte se usan diferentes materiales y la solución nutritiva se suministra por irrigación.
Es fácil crear un sistema DIY, aunque también se pueden comprar huertos hidropónicos domésticos listos para comenzar a cultivar.
Es importante elegir una buena ubicación, donde reciba al menos 6 horas de luz al día, y a la vez esté resguardado del viento y la lluvia. La siembra se puede hacer mediante trasplante con a través de semillas, que previamente habrá que germinar.
Qué puedes plantar
El sistema hidropónico no es una técnica moderna, al contrario, lleva utilizándose desde hace siglos por su eficacia, ya que hay muchas plantas que pueden desarrollarse sin terreno, y solo necesitan estar dispuestas de manera que sus raíces puedan recibir los nutrientes que precisan.
Por supuesto, hay algunos vegetales más aptos para este sistema, por ejemplo las hortalizas de hojas como la lechuga, espinacas o acelgas, que apenas necesitan mantenimiento y crecen muy fácilmente mediante el sistema hidropónico.
Hortalizas como los pimientos y los tomates también pueden crecer bien por este procedimiento, aunque al tratarse de plantas grandes, necesitan más cuidados.
Otro tipo de plantas idóneas para un huerto de hidroponía son las de tipo ornamental, al igual que las hierbas aromáticas como la menta, el orégano, la salvia, la albahaca, el perejil o la lavanda.
Ahora que ya tienes claro qué es un cultivo hidropónico, te animamos a introducir este sistema en tu huerto. Te sorprenderán los resultados.